lunes, 25 de diciembre de 2017
Feliz Navidad
La Navidad es una celebración que no me
gusta mucho, al menos no tanto como antes. Considero que son fiestas
consumistas y también cargadas un tanto de hipocresía. Nos desvivimos por mandar
mensajes de buenos deseos y a menudo nos olvidamos que hay más días en el año
para hacerlo y no solamente en estas fechas pero… así está impuesto por la
tradición y la costumbre.
Las celebraciones navideñas comienzan
con la Nochebuena. Una noche cargada de emotividad, de buenos deseos y
sentimientos. Una noche para celebrar con la familia, en donde preparamos las
mejores viandas que podemos permitirnos para compartirlas con los nuestros. Una
noche en donde nos afanamos porque la paz y la armonía sean las reinas de
nuestras casas.
Por otra parte, es una noche en donde
muchas emociones nos invaden, fluyen, se desbocan… Quizá nos asalten sentimientos encontrados,
tristes y felices a la vez. Si hemos tenido la desgracia de perderlos, seguramente echemos de menos a los seres
queridos que ya no están entre nosotros y, aunque su ausencia nos ponga
tristes, debemos disfrutar con los que aún están con nosotros, con aquellos que
nos acompañan es esta noche especial, sin olvidarnos del ausente pero mirando hacia
adelante, porque la vida está para disfrutar de los momentos y nada conseguimos
con martirizarnos por algo que, lamentablemente ocurrió y nada podemos hacer
por cambiarlo.
La Nochevieja es más de lo mismo, nos
rodeamos de nuestra familia e intentamos pasarlo en grande, comiendo, bebiendo,
brindando y repartiendo buenos deseos para el año nuevo. Lo típico. Como
también es típico comernos las 12 uvas para que nos den suerte para el año que
comienza. Una tradición para la que existen diferentes explicaciones:
“Una dice que todo comenzó en 1882. En esa época la clase
burguesa solía beber champán y comer uvas durante la cena de Nochevieja.
Un grupo de madrileños decidieron ironizar esta tradición
acudiendo a la Puerta del Sol para comer uvas acompañados del sonido de las
campanadas.
Otra teoría remonta la tradición a 1909. Ese año hubo muy
buena cosecha de uva, y los productores decidieron dar más salida al producto
vendiéndola como “uvas de la suerte”.
A lo largo de los años la tradición se ha ido puliendo. Hoy
día mucha gente dice que las uvas simbolizan la abundancia y cada vez que se
come una hay que pedir un deseo. En total 12 deseos.”
Yo, fiel a esta tradición, suelo
comerme las 12 uvas todas las Nocheviejas, y lo hago desde que tengo uso de
razón, frente al televisor, siguiendo la retransmisión de TVE, como mandan los
cánones. Por cierto, la retransmisión de las doce campanadas comenzó en
Televisión Española en el año 1962.
Las fiestas navideñas terminan con la
Epifanía el día 6 de enero. Pero antes está la noche de reyes, la cabalgata, la
noche de los regalos, de las emociones, de los nervios, de la ilusión…, de la
magia.
De esa noche tengo muy bonitos
recuerdos. De pequeño flipaba con los regalos que por arte de magia aparecían
en mis zapatos y alrededor de ellos en la mañana del día 6. ¿Pero cómo?
¡Alucinante! ¡Increíble!
También recuerdo con muchísimo gozo la
cara de mis hijos al ver lo que les habían traído “los Reyes Magos”. Jamás
olvidaré su expresión de asombro y sus miradas de no entender muy bien por qué
se había producido ese “milagro”. ¡Qué etapa de la vida más inocente y más
bonita!
En fin, he dicho al principio que la
Navidad me gusta menos que antes, más bien por el consumismo que rodea esta
celebración pero…, si he de ser sincero tampoco reniego mucho de ella. Y me
quedo con su lado más tradicional y emotivo, con su lado más fraternal y de
concordia. Sea como fuere os deseo que paséis unas felices fiestas y que en el año
que está presto a comenzar alcancéis todos los objetivos por los que lucháis
día a día.
¡¡FELIZ NAVIDAD!!
ESCRITO POR
F.J.M. (Marco Atilio)
Autodidacta, cultivo todas las ciencias y las artes; en especial la astronomía, la literatura y el cine.
sábado, 21 de octubre de 2017
¿Independencia de Cataluña?
Mientras
la sociedad catalana esté fracturada más o menos en dos mitades, Cataluña no
podrá independizarse de España. Otra cosa muy distinta sería que la mayor parte
de los catalanes (80 ó 90 por ciento) quisieran la independencia, en ese caso
nada ni nadie podría impedirlo. Sin embargo, a día de hoy, eso no ocurre, con lo
que una independencia real de Cataluña parece poco menos que una quimera
lejana.
En
cualquier caso, si se conviniera un referéndum pactado como vía para solucionar
el problema, que parece que no se está por la labor de celebrarlo, al menos no
por el gobierno del PP ni por los llamados partidos constitucionalistas PP,
PSOE y Ciudadanos; pero si se llegara a acordar ese referéndum, habría de ser
un referéndum cualificado, en donde Cataluña podría ser independiente cuando
así lo decidieran al menos el 75% de los catalanes, es decir 3/4 partes de su electorado; porque a mi modo de ver, no
sería razonable… ni justo, proclamar la independencia de Cataluña con una
sociedad en la que un gran porcentaje de la misma esté en contra de esa
hipotética independencia.
ESCRITO POR
F.J.M. (Marco Atilio)
Autodidacta, cultivo todas las ciencias y las artes; en especial la astronomía, la literatura y el cine.
jueves, 28 de septiembre de 2017
Desafío independentista
Soy
andaluz, me siento andaluz y estoy muy honrado de serlo pero… también me siento
español, profundamente español. Amo a mi Patria y me siento orgulloso de ella;
de su historia, de sus gentes, de su cultura, de su patrimonio, de su
geografía, de… de todo lo que se llame España.
Por
eso no comprendo que quieran romperla, no comprendo que puedan separar 500 años
de historia. Creo que el independentismo catalán se basa en falacias fácilmente
refutables a poco que uno busque información sobre ello. Yo he buscado esa
información (vosotros también podéis hacerlo) a través de diversos medios,
información que no voy a reproducir aquí ya que esta entrada se haría
interminable. Sí que puedo afirmar basándome en la información encontrada que no
hay ninguna razón históricamente objetiva para que Cataluña tenga que separarse
de España. Ni histórica, ni geográfica, ni de ninguna clase. Al menos yo no la
encuentro.
Por
otro lado, creo que la convocatoria de este referéndum se ha hecho de forma
totalmente ilegal y saltándose todos los procedimientos democráticos. Así no es
de extrañar que el Estado reaccione, no puede cruzarse de brazos ante el órdago
independentista e intentará que la consulta ilegal no se lleve a cabo. Lo que
espero y deseo es que la cordura y no el fanatismo imperen el 1 de octubre.
Ojalá sea así porque los ánimos están muy exaltados y las emociones a flor de
piel.
Yo
por mi parte siento una profunda tristeza a la par que rabia contenida. Y pido
a Dios que a partir del 1 de octubre impere el diálogo y que de ese diálogo
salga una solución que contente a todas las partes. España no se merece lo que
está pasando, España no merece políticos fanáticos que quieran acabar con ella.
Tampoco merece políticos inmovilistas a todas luces ineptos que nos han llevado
a esta situación por su cabezonería en no hacer nada pensando que las cosas se
arreglarían solas. Me temo que con los actuales interlocutores el problema será
insoluble. Pues habrá que cambiarlos. Por el bien de España.
Marco Atilio
ESCRITO POR
F.J.M. (Marco Atilio)
Autodidacta, cultivo todas las ciencias y las artes; en especial la astronomía, la literatura y el cine.
sábado, 9 de septiembre de 2017
España vs Cataluña
La
firma por parte del Govern de la convocatoria del referéndum del 1 de octubre y
la aprobación en el Parlament de la Ley
de Transitoriedad Jurídica para proclamar a Cataluña un Estado
Independiente de España en el caso de que ganase el “SÍ” en el referéndum…
El
anuncio del Presidente del Gobierno Mariano Rajoy de que, atendiendo la
sentencia del Tribunal Constitucional, el referéndum no se celebrará en ningún
caso y que pondrá todos los medios que sean menester para impedir la consulta…
Todo
esto me produce cierto desasosiego y bastante incertidumbre. Creo, sinceramente,
que se producirá más de un altercado el próximo 1 de octubre. Ojalá y la sensatez
y el sentido común prevalezcan pero esto tiene muy mal cariz.
No
profundizaré en el fondo del problema y de por qué se ha llegado a este grado
de tensión entre el Gobierno Central y el de la Generalitat. Sí diré que en mi
opinión, la torpe gestión que ha llevado a cabo el gobierno del PP con Rajoy a
la cabeza, del problema de Cataluña, sin ofrecer ningún tipo de alternativa, ha
tenido mucho que ver y su inmovilismo ha acrecentado el sentimiento
nacionalista y separatista.
La
última vez que Cataluña intentó separarse de España fue el 6 de octubre de 1934 cuando se proclamó El Estado Catalán por el Presidente de la Generalitat Lluís Companys. La respuesta del
entonces Presidente del Gobierno de la Segunda República, Alejandro Lerroux no se hizo esperar, declarando el estado de
guerra en aplicación de la Ley de Orden
Público de 1933.
Aquel
trágico episodio se saldó con entre 46 y 74 muertos según sean las fuentes
consultadas y más de 250 heridos. Hubo alrededor de 3.000 personas detenidas,
entre las cuales se encontraban el Presidente Lluís Companys y todo su gobierno
en pleno así como varios diputados. La autonomía catalana fue suspendida
indefinidamente.
Espero
y deseo que no tengamos que lamentar tragedias como la de 1934 y el fanatismo
no salga a relucir en todo este lamentable episodio de la historia de España
que nos ha tocado vivir.
Qué
triste es que las personas no luchen por unir y sí por separar. Qué triste es
que las personas no sepan convivir en paz, en armonía, unas con otras.
Termino
con una frase de Albert Einstein: ”El
nacionalismo es una enfermedad infantil. Es el sarampión de la humanidad”.
Marco Atilio
ESCRITO POR
F.J.M. (Marco Atilio)
Autodidacta, cultivo todas las ciencias y las artes; en especial la astronomía, la literatura y el cine.
miércoles, 2 de agosto de 2017
Adiós abuelo Kiko
Ya
terminaste el camino
pero
tu historia nos queda,
y
tu historia fue tan buena,
que
a pesar del vil destino
de
no escapar de la parca,
tu
recuerdo quedará,
indeleble
en nuestras almas.
*****
Adiós
querido Kiko,
pasear
a tu lado por la vida
fue un honor y un privilegio.
ESCRITO POR
F.J.M. (Marco Atilio)
Autodidacta, cultivo todas las ciencias y las artes; en especial la astronomía, la literatura y el cine.
jueves, 6 de julio de 2017
Psicópatas en la política
Navegando por internet me he topado con este esclarecedor
artículo aparecido en el diario Levante el día 20 de diciembre de 2013 y
escrito por el médico y escritor Alberto Soler Montagud. Por su interés (al menos para mí) lo
transcribo a continuación para todos los lectores de Yumys Galaxy.
¿Depende de sicópatas el estado del bienestar?
"Abunda en las altas esferas un estereotipo de individuos que aunque simulen
tener conciencia social sólo actúan por sus ansias de acumular dinero y poder.
La siquiatría los llama sicópatas aunque la inmensa mayoría nunca mata (al
menos directamente) como sucede con los asesinos en serie de la ficción.
Se caracterizan por ser mentirosos y narcisistas, manipuladores con gran
encanto en apariencia aunque por dentro sean gélidos y ajenos a los afectos que
fingen. Adictos al poder y al dinero, son impacientes, buscan recompensas
inmediatas a sus anhelos, se creen inmunes a las consecuencias de sus
tropelías, rechazan normas y leyes, delinquen con facilidad sin mostrar
vergüenza o arrepentimiento, carecen de emociones (que no obstante fingen),
muestran una nula ansiedad ante el peligro (circunstancia que les impele a
actuar con premeditación y una falsa valentía que no es más que
irresponsabilidad debida a su incapacidad para sentir temor) y eluden con
frecuencia a la justicia falseando creíblemente la realidad y negando lo que se
les imputa.
Como la psicopatía es cuatro veces más frecuente en los estamentos sociales
que ostentan el poder, hay quienes deducen que el capitalismo se habría
convertido en una fuente de sicopatía social al premiar ciertas características
de la personalidad psicopática. No obstante, la realidad pone en evidencia que
también el comunismo y otros totalitarismos dan cobijo a líderes, altos cargos
y funcionarios con rasgos similares a los descritos y cuya única meta es su
enriquecimiento personal.
Aunque hay muchos tipos de sicópatas, nos bastará sólo con dos para la
reflexión que este artículo pretende promover: a) los políticos con rasgos
psicopáticos, son unos presuntos servidores públicos que sólo trabajan para sí
mismos (a pesar de fingir un interés social) y que se aferran patológicamente
al poder, les cuesta delegar y son reacios a dimitir si se les descubre en una
ilegalidad; b) los sicópatas de cuello blanco, son individuos no muy distintos
a los anteriores (con quienes suelen relacionarse) que desde bancos, empresas,
iglesias y organizaciones sin ánimo de lucro, amasan inmensas fortunas sin
importarles perjudicar a pequeños ahorradores y hasta organismos oficiales
corrompiendo a funcionarios proclives al cohecho con tentadoras ofertas.
Nuestro país sufre los desmanes de políticos de distintas ideologías,
empresarios, banqueros, representantes sindicales y miembros de una familia
aparentemente intocable, y la culpa de ello, además de la imputable a los
presuntos sicópatas, la tiene la resignada apatía de la ciudadanía y los
políticos que les protegen al considerarlos ciudadanos ejemplares y un modelo a
seguir. Es deber de todos no elegir en las urnas a quienes exhiban
comportamientos psicopáticos como los descritos, ni tolerar su presencia en las
instituciones públicas y/o privadas, tarea harto difícil habida cuenta de que
es muy difícil conseguir que los especímenes de esta calaña abandonen el poder
una vez acceden al él".
Artículo original:
ESCRITO POR
F.J.M. (Marco Atilio)
Autodidacta, cultivo todas las ciencias y las artes; en especial la astronomía, la literatura y el cine.
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